viernes, 5 de junio de 2015

¿Eye Tracking a ojos cerrados?

   
 El Eye Tracking  o en español seguimiento ocular es una herramienta genial para el neuromarketing, tiene una gran potencial que si la utilizamos en un diseño adecuado, la interpretamos de forma clara y se llega a conclusiones correctas, aportará información vital para el estudio.

Muchas compañías han empezado a incorporar el seguimiento ocular dentro de sus técnicas de estudio para conocer el recorrido visual del Shopper y crear mapas de fijación en respuesta a un estímulo audiovisual que puede ser un spot publicitario, página web, pasillos de un supermercado, góndola, etc.

Muchos estudios arrojan distintos resultados que ayudan a las compañías en sus estrategias de marketing, como por ejemplo: 

1.Los rostros son lo primero que atrae la atención ante un estímulo audiovisual. 

2.Cada nuevo plano en un spot genera un nuevo incremento de atención

3.Texto en la derecha, imágenes a la izquierda

4.Las curvas son más atractivas para el ojo que las líneas rectas.

5.En una tienda dedicamos más tiempo a mirar productos que finalmente no compraremos que productos que vamos a comprar.


Teniendo en cuenta todo lo que se puede hacer a través de Eye Tracking, surge una contradicción, los estudios de Eye Tracking, parten del supuesto “ojo-mente” si un tipo mira algo, es por que está pensando en ello, pero eso puede ser verdad o puede ser mentira, ya que cada persona en innumerables ocasiones, tiene la vista puesta en punto, como en el rostro de un conferenciante, en los productos de la góndola, en un comercial de televisión, etc. Pero su mente no está conectada con los ojos y está pensando en otra cosa.


Entonces, si en un estudio empleamos solamente la información que nos brinda el Eye Tracking, no se puede asegurar que el sujeto realmente prestaba atención en la tarea. En cambio, si se podría tener en cuenta, si al estudio de Eye Tracking, le aplicamos variables como la conductancia eléctrica de la piel, la actividad de la tasa cardíaca o eléctrica de músculos faciales, ahí podríamos tener distintas medidas que respaldarían nuestras conclusiones.